Época de exámenes
No es estudiar. A eso ya estoy acostumbrado y la verdad es que no termino de imaginarme la vida sin estudiar.
Tampoco el hecho de encerrarme de dos a cuatro semanas en la biblioteca. Se está calentito y hay un montón de buenos libros y gente interesante.
No, lo que más odio de la época de exámenes es cuando tu cabeza te traiciona. Estás feliz y contento (sarcasmo) frente a un taco de apuntes, lidiando con ellos como si de arpías se tratara y va tu sobre(sub)desarrollado coco y empieza a pensar por su cuenta y sin autorización. Puede pensar en cosas importantes (¿Qué voy a hacer con…?), puede pensar en cualquier hobby (¡Vaya pedazo de cómic el de…!) o puede tomar las de Villadiego y pensar directamente en gilipolleces (¡Piiiiii! Este es el cerebro de Joaquín pasando a modo stand by. No fumen y mantengan su asiento en posición vertical. El servicio les ofrecerá en breve bebidas y…).
También es bastante divertido (sí, es otro sarcasmo) cuando se pone a pensar en cosas que no debería pensar (Y entonces yo dije… y respondió… pero, ¿Qué quería decir con…?) o cuando llevas tanto rato con los libros que tu mente solo se arrastra (Yo iba a hacer algo… si hombre, algo muy normal… algo que hago todos los días… ¿Tendrá que ver con ese ruido extraño que hacen mis tripas?).
Esto de cultivar la mente no debe ser bueno. Sinceramente, creo que te pueden crecer berenjenas en el cerebro, de tanto cultivar. Mucho mejor dejar las telarañas que tengas en el coco y quizá eliminar a las neuronas más débiles con un chorrito de sangría (selección natural). Pero bueno chic@s. Es lo que nos toca. Todo esto sirve para que el día de mañana tengamos un buen curro (bien remunerado, se entiende) y podamos corrernos las juergas que no nos corremos ahora. Espero que disfrutéis mucho estos exámenes (¿Alguien puede aventurar que recurso literario acabo de utilizar en la última frase?) y que nos salgan muy bien.
Antes de irme, una sola cosa: ¿Qué es lo que más odiáis vosotr@s de esta época? Es porque me mola el rollo de las encuestas. ¡No seáis tímid@s!
Etiquetas: sentimientos